UQUIA, su iglesia y su llama Gigante

UQUIA, Jujuy

En el tramo norte de la ruta nacional n° 9 entre las ciudades de Tilcara y Humahuaca, dónde las elevaciones de la famosa quebrada de la Provincia de Jujuy estallan en colores impensados,  se encuentra un pequeño poblado llamado Uquía , que tiene una pequeña plazita con modernos  juegos para chicos y grandes y una pequeña iglesia que se abre con una gran llave, y todo respaldado por una inmensa cadena de cerros multicolor., todo  el entorno se muestra como una señal de contraste y esto nos indica que estamos en el norte Argentino, y que tiene un inconfundible sello jujeño.

Uquía es un pueblo colmado de serenidad y ubicado a poca distancia del Río Grande, cuenta con callecitas estrechas bordeadas por casas bajas que repiten el color rojizo del barro con el que están construidas invitando a dar un paseo con aires coloniales. Algunos árboles completan el pintoresco paisaje urbano.

Cualquiera sea el recorrido siempre termina te llevará a descubrir la sencilla pero atrapante Iglesia de San Francisco de Paula, declarada Monumento Histórico Nacional. Resistiendo el paso del tiempo permanece allí con sus paredes  impolutamente blancas y conservadas desde 1691 La pequeña iglesia atesora una importante colección de nueve Ángeles Arcabuceros: estos cuadros únicos son pinturas realizadas por los

indígenas y pertenecen a la escuela cuzqueña. Para ingresar, se debe abrir la puerta con una llave de plata que pesa 400 gramos.

La iglesia Ubicada frente a la plaza de Uquía, fue declarada Monumento Histórico Nacional al constituir una de las construcciones más remotas, datando de fines del siglo XVII.Su fachada posee la torre separada de la nave principal de la misma y un arco en su entrada que caracteriza cada una de las fotos tomadas. La particularidad de esta iglesia radica en que en su interior presenta numerosas obras pictóricas del período cuzqueño. Tal vez la obra más destacada es la de los “Ángeles Arcabuceros”, peculiar porque los nueve ángeles están vestidos con ropas del siglo XVII y portan arcabuces.

Pero esto no es todo, Uquia es in sitio ideal para los amantes de la arqueología que podrán recorrer los estratos rocosos y descubrir testimonios milenarios; trekking, cabalgatas, paseos en bicicleta y excursiones son las opciones para disfrutar al aire libre; las hábiles manos de los lugareños elaboran hermosas artesanías que se transforman en otro tesoro local y en un recuerdo perfecto del paso por estas tierras

Próximo al lugar y sobre la misma ruta 9, se encuentra un descomunal shopping de artesanías en los que otrora fuera un inmenso restaurante y parrilla.

Es fácil de descubrir porque el lugar se ve desde muy lejos, porque en medio del desierto aparece esta construcción dominada por una inmensa LLAMA TROYANA,  Llamada el GUANUCO , que espera el lugar el desembarco de turista, y los inmenso salones despliegan miles de artesanías en barro y madera  y tapices de todo tipo, están inmenso como la inmensidad del paisaje que lo rodea. La parrilla esta en desuso pero la

barra sigue intacta coronada por dos esculturas de llamas. Pero como todos estos lugares también ofrecen como atracción llamas en corral que pastan sin cesar y lucen saludables.

Este mega establecimiento con todas las comodidades, con esculturas colosales, es un emprendimiento comunitario, y no figura en la guias y recomendaciones turística, pero la fabrica de artesanía es un lugar imperdible,. Cuatro o cinco generaciones de artesanos,

provenientes de los pueblos originarios (lucen con orgullo su bandera) cuyo apellido es Guanuco, han desarrollado un complejo impactante en el que sorprendentemente no se detienen los tours, tan solo autos particulares, pese a estar sobre la ruta y a no pasar de ningún modo desapercibido.........  Arturo