BODEGA MUSEO GRAFIFGNA
Bodegas que integran la Ruta del
Vino.
Petit palacio de la familia Graffigna al costado de la bodega y museo |
Decir Graffigna en San Juan, es decir bodega, es decir vino, también radio, galería comercial, cine, es una palabra Graffigna fue el sinónimo del trabajo y del progreso de una familia de inmigrante que además de talento le dio a su nombre un sello de distinción. Es impresionante ver en la historia de su museo en la propia bodega como de la nada, a fuerza de puro trabajo se convirtieron en una de las familias mas distinguidas de San Juan, que supieron incursionar y modificar hasta muchas costumbre de un
pueblo en plena formación.
Es asi que la bodega más antigua de
la provincia de San Juan ejerció un rol fundacional en la implantación de
viñedos especiales con uvas que presentaban condiciones sobresalientes para
elaborar productos de alta gama, que rápidamente fueron ganado fama y prestigio
internacional. Rapidamente la bodega se fue tecnificando incoporando las
herramientas y maquinarias mas modernas en cada momento y el crecimiento de la
misma fue exponencial, sobe todo hay que tener en cuenta que estamos
hablando de 1870 año de su fundación. Graffigna es la bodega mas antigua de San Juan y la segunda mas antigua de Argentina.
hablando de 1870 año de su fundación. Graffigna es la bodega mas antigua de San Juan y la segunda mas antigua de Argentina.
Hoy el público puede ser testigo de
la historia de la bodega y su crecimiento, visitando el Museo Santiago
Graffigna. Un lugar que guarda cada paso del progreso de esta bodega, desde la
llegada de don Santiago hasta los modernos sistemas de producción de hoy en
día. El Museo y bodega Santiago
Graffigna se encuentra en Colón 1342 norte Desamparados, San Juan, y como suele
suceder el progreso y
el crecimiento de la población sanjuanina fue rodeando su entorno y sus viñedos que desaparecieron para dar paso al crecimiento de barrios residenciales.
el crecimiento de la población sanjuanina fue rodeando su entorno y sus viñedos que desaparecieron para dar paso al crecimiento de barrios residenciales.
La bodega Graffigna fue fundada en 1870 por un joven
inmigrante italiano, fue una empresa
familiar que fue convirtiéndose con los años en una de las bodegas más
importantes e innovadoras de la Argentina. Ubicada en la provincia de San Juan,
la misma se impuso como modelo emblemático de la vitivinicultura local. Hoy
como todo empresa familiar termina en manos de grupos Gerenciadores y de hecho
Pernod Ricard el grupo de bebidas francés, al cual pertenece, le brinda un nuevo impulso al posicionarla dentro de su selecta cartera internacional de bodegas Premium. Es en aquella provincia alejada pero llena de promesas, que Santiago Graffigna, desembarcó siendo tan solo un niño -cumplía 12 años- desde su pueblito italiano de Solesi, atraído por una carta de su tío Juan invitándolo a trabajar a su lado en los viñedos sanjuaninos. Santiago, crecio con la tradición vitícola italiana arraigada en la sangre, desarrolla el negocio familiar, adquiere nuevas tierras y empieza a construir su propia bodega que es la que actualmente se conoce. La llegada del ferrocarril en 1885 genera un gran crecimiento en la actividad: en pocos años la bodega multiplica sus ventas por diez. Una década después, el hijo mayor de los Graffigna, Juan A. Graffigna, vuelve de Italia con el título de enotécnico obtenido en la Escuela de Alba en Milán asumiendo pronto la dirección técnica del establecimiento, introduciendo todo tipo de cambios en los métodos enológicos como el uso del frío en la vinificación, nuevas cepas, la instalación de los primeros compresores y de un tanque de 200.000 litros proveniente de Francia, único en toda Latinoamérica, estamos hablando de historia y tecnología reciente, pero lo que se mantiene vivo es el espíritu de su creador de trabajar con la ultima tecnología disponible. Graffigna se destaca en aquel entonces por ser una de las bodegas más innovadoras del país: el nuevo establecimiento modelo que construye, llamado La Rinconada (habitualmente conocido bajo el nombre de Don Juancito por ser proyecto del hijo del fundador), compuesto por tres pisos donde transita la uva por un sistema de declive natural es un ejemplo de su política de avanzada como el hecho de proceder al embotellamiento en origen o de tener un desvío privado de la vía de ferrocarril de cargas para facilitar la distribución de su mercadería. En la misma época, la bodega hace instalar en San Juan la más alta antena radiofónica de Sudamérica dando nacimiento a Radio Colón, lo que demuestra el espíritu emprendedor de una familia que hizo de su nombre una marca registrada
Pernod Ricard el grupo de bebidas francés, al cual pertenece, le brinda un nuevo impulso al posicionarla dentro de su selecta cartera internacional de bodegas Premium. Es en aquella provincia alejada pero llena de promesas, que Santiago Graffigna, desembarcó siendo tan solo un niño -cumplía 12 años- desde su pueblito italiano de Solesi, atraído por una carta de su tío Juan invitándolo a trabajar a su lado en los viñedos sanjuaninos. Santiago, crecio con la tradición vitícola italiana arraigada en la sangre, desarrolla el negocio familiar, adquiere nuevas tierras y empieza a construir su propia bodega que es la que actualmente se conoce. La llegada del ferrocarril en 1885 genera un gran crecimiento en la actividad: en pocos años la bodega multiplica sus ventas por diez. Una década después, el hijo mayor de los Graffigna, Juan A. Graffigna, vuelve de Italia con el título de enotécnico obtenido en la Escuela de Alba en Milán asumiendo pronto la dirección técnica del establecimiento, introduciendo todo tipo de cambios en los métodos enológicos como el uso del frío en la vinificación, nuevas cepas, la instalación de los primeros compresores y de un tanque de 200.000 litros proveniente de Francia, único en toda Latinoamérica, estamos hablando de historia y tecnología reciente, pero lo que se mantiene vivo es el espíritu de su creador de trabajar con la ultima tecnología disponible. Graffigna se destaca en aquel entonces por ser una de las bodegas más innovadoras del país: el nuevo establecimiento modelo que construye, llamado La Rinconada (habitualmente conocido bajo el nombre de Don Juancito por ser proyecto del hijo del fundador), compuesto por tres pisos donde transita la uva por un sistema de declive natural es un ejemplo de su política de avanzada como el hecho de proceder al embotellamiento en origen o de tener un desvío privado de la vía de ferrocarril de cargas para facilitar la distribución de su mercadería. En la misma época, la bodega hace instalar en San Juan la más alta antena radiofónica de Sudamérica dando nacimiento a Radio Colón, lo que demuestra el espíritu emprendedor de una familia que hizo de su nombre una marca registrada
En 1944 se
produce el conocido Terremoto de San Juan que destruyo mas del 90 % de los
edificios, por supuesto esta bodega pierde parte de sus instalaciones. Solo una
bodega
se mantuvo en pie por haber sido construida con sistemas antisísmicos, que fue la Antigua Bodega, hoy bodega museo también.Si bien la bodega Graffigna logra recuperarse rápidamente, el efuerzo reconstrucción y modernización de sus establecimientos, se ven opacados por la crisis económica del país, y la crisis económica mundial con un competencia internacional cada vez más fuerte, razones que llevan a la familia a ceder su emprendimiento al grupo internacional Allied Domecq en 1980, quien a su vez es adquirido por Pernod Ricard en el 2005. El grupo francés no duda en realizar una fuerte inversión en Graffigna en pos de incluirla en su círculo exclusivo de marcas propias de vinos Premium, compuesto por las bodegas Jacob’s Creek de Australia, Brancott Estate de Nueva Zelandia y Campo Viejo de España. Es interesante esta historia, porque muestra la evolución de la fuerza del trabajo, del espíritu de los pioneros, de los que forjaron un país, y de la economía globalizada. Todo esta situado en un pequeño resumen que presenta la historia de la bodega hasta nuestros días. Este no es el único caso la mayoría de las bodegas hoy tiene un alto
equipamiento tecnológico para la producción que hacen que los vinos ya no sean un producto artesana. El vino es hoy un producto altamente tecnológico con una fermentación controlada por computadoras y realizadas en tanques de acero inoxidables, estamos hablando de un producto industrializado que entro en la comercialización internacional con estrictos controles de calidad.
se mantuvo en pie por haber sido construida con sistemas antisísmicos, que fue la Antigua Bodega, hoy bodega museo también.Si bien la bodega Graffigna logra recuperarse rápidamente, el efuerzo reconstrucción y modernización de sus establecimientos, se ven opacados por la crisis económica del país, y la crisis económica mundial con un competencia internacional cada vez más fuerte, razones que llevan a la familia a ceder su emprendimiento al grupo internacional Allied Domecq en 1980, quien a su vez es adquirido por Pernod Ricard en el 2005. El grupo francés no duda en realizar una fuerte inversión en Graffigna en pos de incluirla en su círculo exclusivo de marcas propias de vinos Premium, compuesto por las bodegas Jacob’s Creek de Australia, Brancott Estate de Nueva Zelandia y Campo Viejo de España. Es interesante esta historia, porque muestra la evolución de la fuerza del trabajo, del espíritu de los pioneros, de los que forjaron un país, y de la economía globalizada. Todo esta situado en un pequeño resumen que presenta la historia de la bodega hasta nuestros días. Este no es el único caso la mayoría de las bodegas hoy tiene un alto
equipamiento tecnológico para la producción que hacen que los vinos ya no sean un producto artesana. El vino es hoy un producto altamente tecnológico con una fermentación controlada por computadoras y realizadas en tanques de acero inoxidables, estamos hablando de un producto industrializado que entro en la comercialización internacional con estrictos controles de calidad.
Por es ello es bueno destacar esta historia ya que
Graffigna desde su fundación en 1870 por Santiago Graffigna, que ocupa un lugar
destacado en la viticultura nacional, el desarrollo de la bodega acompañó
siempre los valores instaurados desde su inicio: búsqueda de excelencia, innovación y mejora constante. El grupo industrial que la maneja actualmente incluyó la incorporación de tecnología agroindustrial de última generación, así como equipamiento y modernas técnicas de elaboración, permitiendo aumentar la capacidad de producción y de almacenamiento de la bodega.
siempre los valores instaurados desde su inicio: búsqueda de excelencia, innovación y mejora constante. El grupo industrial que la maneja actualmente incluyó la incorporación de tecnología agroindustrial de última generación, así como equipamiento y modernas técnicas de elaboración, permitiendo aumentar la capacidad de producción y de almacenamiento de la bodega.
La Historia, como ya mencionamos se
inicia allá por el año 1870, cuando Don
José Graffigna, un inmigrante italiano con corazón de aventurero, fundó la
bodega en esas
tierras donde todavía estaba todo por hacer y ya le confiere ese sentido de Innovación, y mejora continua. Son varios los ejemplos que muestran este espíritu emprendedor que se adelanto mas un siglo en su tiempo.
tierras donde todavía estaba todo por hacer y ya le confiere ese sentido de Innovación, y mejora continua. Son varios los ejemplos que muestran este espíritu emprendedor que se adelanto mas un siglo en su tiempo.
Ha quedado docuentado que en lo referido a los
viñedos, Graffigna fue pionero en la introducción de vides americanas,
resistentes a la filoxera y en ensayos de injertos.
Paralelamente, hace casi 90 años avanzaron con
la mayor colección ampelográfica del país, marcando un verdadero punto de
inflexión en el conocimiento del terroir.
No es para menos: esta bodega fue responsable de
cultivar 800 variedades de uvas importadas de Europa para conocer el poder de
adaptación al terruño sanjuanino y cuáles mostraban el mayor potencial.
Cuentan sus dueños que en el ámbito comercial,
la bodega fue la primera en vender vinos embotellados con marca en el país,
para lo cual en la década de 1920 introdujeron novedosas máquinas de
fraccionamiento, dando inicio al envasado en
origen.
Patio de los toneles |
En otros aspectos de ese espíritu emprendedor
digamos que en 1930 funcionó por primera vez en forma oficial radio Colón y en
1942 se construyó una nueva Planta Transmisora y un nuevo mástil irradiante de
216m de altura, en ese entonces, el más alto de América del Sur.
La historia cuenta que en los inicios de las
trasmisiones radiales , Graffigna ofrecía al pueblo audiciones literarias y
musicales desinteresadas, contribuyendo a la expansión del arte, la cultura.
Asimismo, cumplió la función de
defender la reputación del vino frente a las campañas de difamación del mismo", destacaron desde la bodega, dejando en claro la innegable comunión entre vino y cultura, cosa que hoy nadie discute.
defender la reputación del vino frente a las campañas de difamación del mismo", destacaron desde la bodega, dejando en claro la innegable comunión entre vino y cultura, cosa que hoy nadie discute.
La visita al museo, una
ventana abierta al pasado
No solo con el objeto de mantener el patrimonio histórico
de la bodega, sino como un aporte cultural a la ciudadanía, se creó el Museo
Santiago Graffigna, un establecimiento de 1.200 m2 cubiertos que suma otros
1.000 m2 en áreas exteriores.
Equipos de fermetacion en acero inoxidable |
Una visita al museo incluye la gentileza a degustación de los vinos que actualmente elabora la bodega. Lo primero es pasar por una pequeña sala de proyección donde se pasa un interesante video introductorio.
Luego se pasa a la descripción de los procesos históricos
de elaboración de vinos, se visita la
zona de cavas, el patio de las cubas, y las históricas oficinas , las zonas de
oficina donde funcionaba la primera radio a la que se hizo referencia
anteriormente, así como un pequeño viñedo experimental donde se podrán
interiorizar sobre las características de las cepas y los procesos de poda y
cosechas.
Es evocativo, dedicado a resaltar la figura de
Don Santiago. Por eso, apenas uno ingresa, se encuentra con los elementos que
para él eran
sumamente importantes: la familia y el trabajo". Es muy emocionante leer la carta que le escribe su tio invitándolo a trabajar en la nueva tierra, y dispone a facilitarle su viaje desde Italia a San Juan, sin antes aclararle que debe venir dispuesto a trabajar y luchar con sacrificio para forjarse un porvenir, no lo ofrece nada, solo la oportunidad de un trabajo, pero le marca el camino de la superación.
sumamente importantes: la familia y el trabajo". Es muy emocionante leer la carta que le escribe su tio invitándolo a trabajar en la nueva tierra, y dispone a facilitarle su viaje desde Italia a San Juan, sin antes aclararle que debe venir dispuesto a trabajar y luchar con sacrificio para forjarse un porvenir, no lo ofrece nada, solo la oportunidad de un trabajo, pero le marca el camino de la superación.
Don Santiago Graffigna tuvo una personalidad de
fuerte peso no solo en el entorno de su familia sino también en toda la
sociedad Sanjuanina, si bien dedico su vida a la vitivinicultura, tuvo una
amplia participación en el crecimiento social de San Juan. Las fotos que ilustran
el presente relato, son algunas de las tomadas en varias visitas
realizadas. Arturo
Cultivo modelo del museo bodega Graffigna |
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