martes, 19 de agosto de 2014

SALVADOR M DEL CARRIL Y TIBURCIA DOMINGUEZ Recoleta Buenos Aires

SALVADOR MARIA DEL CARRIL Y TIBURCIA DOMINGUEZ…Una historia de amor y odio.
De San Juan a Buenos Aires, y de  Lobos a la Recoleta. Los cuatro puntos cardinales de esta historia.
Monumento de Salvador M. del Carril y Tiburcia Dominguez en el Cementerio de Recoleta.
Escultura de SM del Carril .Plaza de los Desamparados ..San Juan
Veamos primero quien fue Salvador Maria del Carril, un hombre casi olvidado por la historia Nacional, Un Sanjuanino ilustrado que conoció el exilio, que provenia  de una familia acomodada pero muy austera, que paso momentos muy duros en la extrema pobreza  de su exilio, y desde ese extremo llegó a ser un hacendado que conoció la opulencia económica , pero su mandato de una vida austera, nunca lo pudo superar.

 SALVADOR MARIA DEL CARRIL, El Gobernador más Joven de San Juan (24 años), primer Vicepresidente
constitucional de la Nación, primer Ministro de Economía de B. Rivadavia, promulgó la Carta de Mayo, basada en las nuevas ideas liberales inglesas, muchas de las cuales fueron, más tarde, incorporadas a las constituciones de Rivadavia y a la de 1853. Se doctoro en Córdoba, y fue tan influyente su figura política que en  su funeral Sarmiento al despedirlo expresó  “ A Carril le debemos el ser Argentinos”, sin embargo  se hizo mas popular y se lo recuerda por la historia del desencuentro amoroso con su esposa, que por su trayectoria política.
placa de monumento de Salvador Maria del Carril
Salvador María del Carril (1798-1883) Fue un político austero, un intelectual brillante, como dije fue el primer vicepresidente constitucional de la Nación durante el gobierno del general Urquiza. Fue uno de los intelectuales promotores del fusilamiento de Dorrego. Fue Gobernador de  SAN JUAN su provincia natal.  También fue Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores, durante la gobernación de Lavalle. La  bóveda en el cementerio de la Recoleta  es una construcción monumental en la que la parte más destacada la constituye un baldaquino, en forma de aguja coronada con la figura de Cronos, Dios del Tiempo. Este monumento fue encargado por la esposa de Del Carril, doña Tiburcia Domínguez de Del Carril, al escultor Camilo Romairone.  Sus restos descansan en el cementerio de la  Recoleta, junto al de su mujer.
Busto de Tiburcia Dominguez Cementerio de la Recoleta
La historia describe que Salvador  se casó con Tiburcia Domínguez y López Camelo, (nacida en Buenos Aires en 1814, donde también murió en 1898). el 28 de septiembre de 1831 en la Catedral de Nuestra Señora de las Mercedes, Mercedes, capital del Departamento de Soriano, República Oriental del Uruguay.   Descendiente de una familia de inmigrantes Gallegos  fue un intelectual  brillante en su tiempo, fue jurista y estadista. Recibió educación superior  en derecho civil y canónico en la Universidad de San Carlos en Córdoba; discípulo del Deán Funes.  Recibió su título de doctor en 1816. Trabajo algunos años como periodista y funcionario en el Ministerio de Hacienda en Buenos Aires. Regresó a San Juan y llegó a ser gobernador con tan solo24 años. El 15 de julio de 1826, promulgó la Carta de Mayo, basada en las nuevas ideas liberales inglesas, muchas de las cuales fueron, más tarde, incorporadas a las constituciones de Rivadavia y a la de 1853. Despertó la oposición del clero en tal magnitud, que se vio obligado a alejarse de sus funciones temporariamente; poco tiempo después de reasumir su cargo, presentó su renuncia para dirigirse a Buenos Aires. Se convirtió en ministro de Hacienda bajo la presidencia de Rivadavia por lo que se lo considera ser el Primer Ministro de economía del país. Más tarde, cuando Dorrego fue electo gobernador, prestó servicios como uno de los principales asesores del general Lavalle.
Se lo designó vicepresidente de la Confederación Argentina y posteriormente fue designado para la Corte Suprema (1862) durante la presidencia de Bartolomé Mitre, prestando servicios como su presidente desde 1870 hasta su posterior retiro de la vida pública en 1877, seis años antes de su muerte. Falleció en Buenos Aires el 10 de enero de 1883. Por lo que he leído, el haber sido contemporáneo de Sarmiento y el haberse enemistado con el  clero, fueron las causas que opacaron su carrera, además muchos historiadores lo acusaron de enriquecimiento ilícito, siendo socio de Urquiza en algunos negocios.
En San Juan poco se lo recuerda, pero encontré una foto histórica en la Fundación Bataller que  muestra su estatua en un lugar destacado de la ciudad de San Juan., mientras que en la actualidad la misma se encuentra en una plaza departamental, luego de haber pasado por el Parque Central. En la actualidad sabemos que la valoración política de un personaje de la historia se realiza por la magnitud de su escultura,  y la ubicación de la misma. La foto encontrada dice:
 1885 - Estación del Ferrocarril Andino  Esta es una hermosa imagen de la Estación del Ferrocarril Andino, inaugurada en 1885 con la presencia del presidente de la Nación, general Julio Argentino Roca. En la foto no aparecen automóviles y resalta el edificio de dos plantas que en su momento fue una de las más lujosas estaciones de la línea. En primer plano se alcanza a ver la estatua de Salvador María del Carril que estaba allí emplazada. (Foto publicada en el libro "El San Juan que Ud. no conoció", de Juan Carlos Bataller - La fotografía fue donada por el profesor César H. Guerrero, al Museo Nacif Weiss de la Universidad Católica de Cuyo). La escultura años después fue trasladada al Parque de Mayo para, finalmente, quedar instalada en la Plaza de los Desamparados. Es obra de un escultor italiano, Camilo Romairone, y fue inaugurada el 25 de mayo de 1899.


Daniel Balmaceda Periodista porteño recibido en la UCA, narra de una manera muy amena  en su libro ROMANCES TURBULENTOS DE LA HISTORIA ARGENTINA, la conocida historia de vida entre Salvador Maria del Carril y su esposa Tiburcia Dominguez, y que en forma simplificada he reproducido aquí. Esta  historia también es recreada en las visitas guiadas por el cementerio de recoleta, que no solo guarda tumbas monumentales, sino también muestra a través de sus monumentos, que se puede recrear  la historia de los origines de nuestra república.
“ Corrían los años 1800. El matrimonio integrado por Luisa López Camelo y José Luciano Domínguez, se vieron iluminados por la llegada de seis hijos, entre ellos dos hijas: Tiburcia y María Dolores. Muy tempranamente fallece Domínguez y Luisa se vuelve a casar con Eugenio Villanueva.
En el año 1831, a Tiburcia de 15 años y María Dolores de 17 no le faltaban admiradores y galanes que las festejaban, entre ellos los jóvenes militares José Olavarría e Isidoro Suárez. A mamá Luisa ninguno de los dos le resultaba simpático y no los veía con buenos ojos que sean los
futuros esposos de sus hijitas..
En ese año mamá Luisa enferma gravemente y su marido, Villanueva – padrastro de las chicas – le sugiere que una vez que ella fallezca, se casará con alguna de las adolescentes.
.Luisa a partir de ese hecho, odia a su segundo marido Villanueva y lo considera inhumano, y desleal , entonces llama a su lecho de muerte a dos jóvenes que le resultaban agradables y casaderos con sus hijas: los hermanos Salvador María y José Maria Del Carril.
.En la primavera de 1831, en la localidad de Mercedes, en la
provincia de Buenos Aires, se casan Salvador María y Tiburcia. Eran tiempos difíciles en la patria, en el gobierno estaba Juan Manuel de Rozas, entonces Tiburcia y Salvador María se vieron forzados al exilio en Uruguay. No fue fácil la vida de ambos en tierra uruguaya, Tiburcia y Salvador María usaban la bañera para preparar jabón, que luego vendían y así ganaban su sustento. Eran épocas difíciles en el dinero pero afortunados en el amor. Tiburcia y Salvador se amaban, eran felices y las dificultades económicas no le generaban mayores problemas. Un día el viento de la política dio vuelta. Fue entonces cuando Tiburcia y Salvador María pudieron volver a su patria. Tiburcia espléndida disfrutaba de la vida, sin las privaciones del exilio, Tiburcia se daba todos los gustos  y eran gustos caros, y  Salvador María, con aire de lord inglés, se dedicaba a los negocios, fue el primer vicepresidente del país y también socio de Justo José de Urquiza en diversos emprendimientos. La economía era para los Del Carril floreciente, gracias a la fortuna personal de la familia, los negocios de Salvador María y las
herencias. Salvador María, a pesar de la fortuna que disponía, no aprobaba los gastos de Tiburcia y consideraba que sus gustos eran excesivamente caros. A tal punto llegó su disgusto, que en el año 1862, Salvador María publicó un aviso en los periódicos anunciando que a partir de ese momento no se haría cargo de los gastos y despilfarros de su mujer.( como dice el profesor Lasari, le suspendió la tarjeta de crédito)
Este aviso generó las habladurías y fueron la comidilla de las tertulias de la época. Tiburcia furiosa por supuesto , no pudo tolerar semejante
humillación y decidió que a partir de ese momento no le hablaría mas a su esposo. Y así lo hizo, durante los 21 años que convivieron, Tiburcia nunca abrió la boca, ni aún la presencia de los hijos en el mismo ambiente, hizo posible un cambio en su actitud, Tiburcia se enojo hasta la eternidad. La familia llevaba una vida austera. Salvador siguió con sus negocios, acrecentando la fortuna, realizando adquisiciones entre las que se puede citar a la estancia La Porteña, en Lobos, Provincia de Buenos Aires, donde la familia pasaba sus vacaciones, con Tiburcia incluida, aunque ella no decía palabra alguna.
En el año 1883, en un caluroso enero, fallece Salvador. El ex presidente Domingo F.Sarmiento habló en sus exequias y recordó que Carril había "llenado dos vidas de hombre" y al seguir a Urquiza después de Caseros había evitado reabrir la herida entre unitarios y federales. "A Carril debemos el ser argentinos", concluyó Sarmiento. "Que sea eterna la memoria de su obra, la consolidación de la nacionalidad argentina".
Castillo de Tiburcia Dominguez. Es propiedad privada en Lobos. No se admiten visitas
 Al enterarse de la noticia, su esposa Tiburcia abrió la boca y dijo: "Puedo gastar?" Y Tiburcia realmente comenzó a gastar. En primer lugar le mandó construir un magnífico mausoleo en el cementerio de La Recoleta, en el paquete barrio homónimo de Buenos Aires, con monumento incluido, donde se halla sentado en un sillón, mirando el horizonte, con cara de prócer. Luego Tiburcia viajó por Europa y comienza su vida de disfrute. A su regreso, el casco de la estancia La Porteña de Lobos lo destinó a los peones e hizo construir un palacete, con espejos y mármoles traídos de
Europa, tapices franceses y escaleras versallescas.  Allí se realizaban importantes bailes y cada 14 de abril, para festejar su cumpleaños, Tiburcia contrataba la formación completa de un tren donde viajaban sus amistades, un batallón de mozos y sirvientes, con sus vajillas y bandejas, cocineros con sus delicatesen, floristas con sus mercancías perfumadas para hacer los arreglos, bandas de músicos para alegrar tan magnífica fiesta, que por lo general  se extenderían por varios  días.
Tiburcia falleció en 1898 y a pesar de sus despilfarros, dejó una fortuna de 21.000 hectáreas a sus herederos. En su testamento, dejó expresamente manifestada su voluntad, respecto a que su cuerpo sea colocado en el mausoleo del cementerio de La Recoleta, se colocara su busto, mirando en sentido opuesto a su marido, para que por los siglos de los siglos se sepa que estuvieron y siguen estando enemistados para toda la eternidad.

Es notable pero en el monumento del cementerio de la Recoleta  la escultura de Salvador Maria luce  sentado con aspecto de hombre ilustre En el mausoleo que mandó construir en el porteño cementerio de la Recoleta, sus figuras se encuentran separadas. Del Carril está representado sentado en un cómodo sillón, bajo un baldaquino (Cúpula sustentada por columnas que coronan un monumento escultórico importante) de mármol que lo protege , obra de Camilo Romairone; el busto de su esposa fue colocado dándole la espalda, y luce con gesto adusto como mujer de carácter, en un plano inferior y totalmente desprotegida. Como símbolo del abandono afectivo. Los dos partieron hacia la eternidad en dirección opuesta, si el universo es finito como muchos científicos creen, seguramente algún dia se encontraran de nuevo y marcharan junto hacia la eterna eternidad……………..ARTURO

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